El Valle Central de Chile goza de un privilegio único en el mundo que lo convierte realmente en un paraiso para la producción de vinos premium. El desierto por el norte, la Cordillera de los Andes por el este, el mar por el oeste y los glaciares por el sur; hacen del Valle Central una isla que la protege de enfermedades y plagas.
Por su gran tamaño y micro climas, el Valle Central ofrece excepcionales terroirs para las diferentes cepas logrando vinos tintos y blancos de clase mundial. |